"Queremos que en este policlínico impere el mismo concepto que en los demás policlínicos sindicales que se están levantando en todo el territorio de la República. No queremos para nuestros trabajadores una asistencia en los hospitales públicos; queremos que tengan sus propios hospitales, porque no es lo mismo ir a pedir albergue a un hospital de beneficencia que atenderse en su propia casa."
La frase parece contener un epitafio para el proyecto de Carrillo, en tanto recupera el olvidado concepto de beneficencia en relación con el hospital público. Leída desde la perspectiva que nos da la historia, puede señalar el comienzo de la decadencia de la capacidad hospitalaria estatal, y del crecimiento posterior del poder sindical en el ámbito de la salud.